viernes, abril 06, 2012

Fiesta del Qingming, una cita del pueblo chino con sus muertos

A pesar de que he asistido por tercer año consecutivo al cementerio de Babaoshan, ubicado en el oeste de Beijing, para participar de la Fiesta del Qingming, no dejo de sorprenderme por el gran parecido que guarda con el Día de Muertos en México.

Cada año miles de chinos acuden a los cementerios para agasajar a sus difuntos con arreglos florales y los platillos y bebidas que les gustaban en vida.

Foto: Gabriela Becerra

Los panteones dejan de lado su cotidiana soledad y el color gris que los caracteriza para vestirse de colores y llenarse de bullicio.

Esta conmemoración, también conocida como Día de la Claridad Pura o Día del Barrido de Tumbas, es una de las celebraciones con más tradición en el gigante asiático desde hace 2 mil 500 años.

Desde temprana hora, el pueblo chino acude a los cementerios para barrer, retirar la basura y embellecer el sitio donde descansan los restos de sus seres queridos.

Foto: Gabriela Becerra

Pero la familia no sólo se preocupa por la limpieza, sino que también apapacha a su difunto con panes, fruta, dulces y, en algunos casos, hasta cerveza y cigarros, ofrenda que colocan encima de la sepultura.

 
Foto: Gabriela Becerra

En su visita, algunos aprovechan para retocar los caracteres chinos que, con el paso del tiempo, se despintaron de las lápidas.

Foto: Gabriela Becerra


Foto: Gabriela Becerra

Muchas de las tumbas están decoradas con motivos propios de la milenaria cultura china, como las esculturas de los leones guardianes, que simbolizan protección.


Siempre se ponen en pareja: el macho, a la derecha, descansa su garra en una esfera ornamental; y la hembra, a la izquierda, juega con un felino cachorro.


Foto: Gabriela Becerra

Aunque el Día de la Claridad Pura no tiene ningún fundamento religioso, los chinos creen en la vida después de la muerte y consideran que los vivos tienen la responsabilidad de proteger la sepultura donde descansan sus ancestros.

Una de las costumbres más arraigadas es la quema de billetes simbólicos, pues se piensa que con ese ritual la vida de sus antepasados en el otro mundo será más cómoda y, por qué no, más lujosa. Por eso, en los últimos años se ha agregado la imagen en papel de autos, casas, ordenadores portátiles y hasta iPhones.

Dependiendo de la región, en algunas casas se cuelgan ramitas de sauce para ahuyentar a los malos espíritus, porque este árbol es considerado como un símbolo de "luz y enemigo de la oscuridad" en la cultura china. Además, las familias ponen altares con la fotografía del difunto y le ofrecen comida y flores.


Foto: Gabriela Becerra

Apenas en 2008, el gobierno chino convirtió la celebración en día festivo nacional, con el propósito de facilitar a los familiares la visita a sus difuntos y rescatar la importancia de esta tradición, especialmente entre las nuevas generaciones.

Anteriormente en China, los funerales tenían gran importancia en la vida social. Incluso, había quienes destinaban los ahorros de toda su vida para organizar una digna despedida a sus seres amados.